1. No entrar ladrando a la habitación, ni corretear por el lugar alocadamente. Ni mucho menos desordenar el inmueble.
2. Morder despacio, con delicadeza. Una inclinación suave y una sonrisa elegante bastará.
3. Dejar de usar harapos y vestir de fraq. Un traje italiano quizá sea suficiente.
4. Afeitarse, una buena rasurada al ras es lo más conveniente y es el consejo fundamental.
martes, 9 de agosto de 2011
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3 comentarios:
y, sobretodo, no dejar que te muerda, a menos que estés seguro que luego de eso te dejará hacerle lo que quieras
Ahora mismo me gustaría hacer lo que quiera. Con mordida o sin mordida.
;) super!!!
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